Zara Turner, pasión por Tina y canciones de todos los estilos en una gran voz

Aclaramos un nombre artístico, Zara Turner, que, vale, de acuerdo, el Zara puede entenderse como el diminutivo de la cantante Azahara Mier Martín. Pero lo de Turner tan sólo encuentra justificación en las explicaciones de la artista avilesina: “Siempre sentí una devoción especial por Tina Turner; para mi era como de la familia y de hecho cuando se murió la pasé muy mal”. Pues bien, una vez aclarado, cabe señalar que detrás de esa carta de presentación aparece una figura que se mueve en todos los estilos y con una larga trayectoria en la música, desde que era una niña. “Aparte de que hablaba por los codos, estaba todo el día poniendo voces y cantando por casa; de pequeña me encantaba jugar a eso”, recuerda.

Quizás la afición le viniese de cuna, pues su abuela fue una brillante intérprete de habaneras y a su padre le apodaban “El Ruiseñor”, porque de chico cantaba por los bares para sacarse unas propinillas.

Con su familia residió en Denia (Alicante), donde transcurrió su adolescencia. Y en la Comunidad Valenciana dio sus primeros pasos profesionales en la música, formando parte de un par de orquestas y luego del grupo “Pecados”, telonero de bandas como “Seguridad Social” o “La Unión” en sus conciertos por aquellas tierras.

También ganó un festival local, cómo no, con una versión de “Simply the best”, de su admirada Tina Turner. A partir de ahí dejó de ser “Zari” y “Zarita” para convertirse en lo que es hoy: Zara Turner. Y siguió presentándose a más concursos: la segunda edición de “Operación Triunfo”, superando dos castings; “Canta Canta”, en el “Canal Nou”, y ya de vuelta a Asturias, adonde regresó en 2005, “Operación Orquesta Siglo XXI”, de la "TPA".

“Me gusta el soul, el rock, el rhythm and blues, el heavy metal..., pero en mi repertorio hay de todo; desde cumbias, rumbas, rancheras, pop… En inglés y en castellano. Todo”, dice, al tiempo que adelanta que ahora prepara el debut de un dúo con otra chica con la que coincidió en una pequeña formación al retomar las actuaciones, animada por unos amigos de Piedras Blancas, donde reside en la actualidad. “Tuve oportunidad de irme con una orquesta grande que viajaba por varios países de Europa, pero finalmente no me decidí”, afirma. "Luego me saturé y tuve que dejarlo aparcado durante un tiempo", añade. Como parte positiva de su renuncia a aquella gira tan sugerente, que ahora se puede disfrutar de la voz espectacular de una solista que presenta su calidad artística en bares, auditorios, fiestas…, cosechando merecidos aplausos del público.

• Destacadas